¡Hola! Soy
JOAN
¡Llevo años fotografiando bodas y nunca me había planteado los quebraderos de cabeza que conlleva organizar una!
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¿Sabes qué me ha enseñado la experiencia?
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Que todo pasa muy rápido en ese día que has esperado tanto y quieres vivirlo una y otra vez. Poder darle al botón de "pause" a todas esas emociones que no te da tiempo a procesar.
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Los recuerdos se diluyen. Las fotos son eternas.
MIS VALORES
Soy fotógrafo de bodas. Pero primeramente soy un ser humano.
Y cada persona va unido a unos valores que deben estar en sintonía con él.
NATURALEZA
Aprecio el gran regalo que cada día nos ofrece la Madre Tierra.
Un bonito atardecer.
La brisa marina.
El canto de un pájaro.
Mis colores son naturaleza.
SENSIBILIDAD
Dicen que tengo una sensibilidad especial para apreciar la ternura y el cariño de las personas.
Sorprenderme y admirar.
Me emociono con mi entorno y mi fotografía resume lo que siento.
APRENDIZAJE
La vida es movimiento y me uno a él.
Me apasiona conocer gente nueva.
Lugares desconocidos.
Sabores increíbles.
Me gusta aprender. Leer. Viajar.
Formarme y renovarme.
¿Cómo he llegado hasta
La vida me ha enseñado que todo llega, todo pasa y todo cambia.
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Un día, un frustrado diseñador gráfico y apasionado de la fotografía pensó que se conformaba con tener una vida tranquila y un sueldo fijo a final de mes. La ocasión se presentó: jornada intensiva en una empresa de logística.
Durante muchos años tuve que cargar con el peso del conformismo. Mis días eran grises. Vivía rodeado de hombres de gris, como se describe en el libro “Momo” (aprovecho para deciros que es uno de mis libros favoritos).
Hasta que un día algo hizo “click” dentro de mí. Sentí que debía luchar por aquello que me apasionaba.
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Los eternos minutos de cada jornada se hacían más llevaderos escuchando podcasts y leyendo libros sobre fotografía, marketing, y emprendimiento.
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Pero, ¿cómo iba yo a dejarlo todo, viniendo de una familia humilde y llegando a duras penas a final de mes?
AQUÍ?
"LA FOTOGRAFÍA HA CAMBIADO MI VIDA"
A día de hoy te puedo decir que todo pasa, pero cuando estás en el hoyo te parece que nunca vas a salir de ahí.
De repente miras atrás y piensas; "Ojalá hubiera venido el Joan del futuro a decirme que todo va a salir bien, que llegará tu oportunidad."
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Y te aseguro que todo cambia porque la vida está en constante movimento. La tierra, la naturaleza y como un mozo de almazén logró dedicarse a lo que más amaba, la fotografía.
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Siempre dudaba en si tirarme o no a la piscina por miedo a que no hubiera agua en ella. Hasta que llegó Carme, la madre de mi princesita llamada Gisela, me puso frente al trampolín y me dijo: ¡coge aire, impúlsate y salta!